Tal y como se indica en este artículo del "El País" PP, PNV y PSOE se han puesto de acuerdo en eso de permitir el monopolio de un determinado sistema operativo y de un conjunto de herramientas.
Han rechazado la propuesta de IU-CV y ERC de implantar el uso del software libre en la administración porque, según ellos, "discrimina y limita la libertad". Vamos, básicamente, que no tienen ni idea de qué es el software libre, de cómo limita la libertad de los usuarios utilizar herramientas cerradas y, sobre todo, que no les interesa saberlo.
¿Acaso no discrimina mi libertad que los archivos que me descargo de, pongamos por ejemplo, la página del Ministerio de Industria estén en formato .doc y deba tener instalado MS-Word para poder verlos?. ¿Y que para que me tengan en cuenta, debo enviarle los documentos en ese mismo formato?. ¿Eso no es limitar mi libertad de usar en mi ordenador el software que a mí me de la gana y que pueda compartir mis documentos con mis amigos, compañeros de trabajo y la Administración?.
Vamos, que parece que ha colado el bulo que está montando Microsoft acerca de la libre competencia y que ellos tienen el mismo derecho que el software libre a competir por esa tarta tan apetitosa. Pero como ya he explicado más antes, supone tener a 40 Millones de españolitos usando un programa por la fuerza y, sobre todo, 40 millones de españolitos cambiando a otra versión cuando a Microsoft le de la gana de cambiar el formato de sus archivos.
Tal vez deberíamos castigar a nuestros políticos a que, por lo menos supieran que es OpenDocument (OASIS).
Han rechazado la propuesta de IU-CV y ERC de implantar el uso del software libre en la administración porque, según ellos, "discrimina y limita la libertad". Vamos, básicamente, que no tienen ni idea de qué es el software libre, de cómo limita la libertad de los usuarios utilizar herramientas cerradas y, sobre todo, que no les interesa saberlo.
¿Acaso no discrimina mi libertad que los archivos que me descargo de, pongamos por ejemplo, la página del Ministerio de Industria estén en formato .doc y deba tener instalado MS-Word para poder verlos?. ¿Y que para que me tengan en cuenta, debo enviarle los documentos en ese mismo formato?. ¿Eso no es limitar mi libertad de usar en mi ordenador el software que a mí me de la gana y que pueda compartir mis documentos con mis amigos, compañeros de trabajo y la Administración?.
Vamos, que parece que ha colado el bulo que está montando Microsoft acerca de la libre competencia y que ellos tienen el mismo derecho que el software libre a competir por esa tarta tan apetitosa. Pero como ya he explicado más antes, supone tener a 40 Millones de españolitos usando un programa por la fuerza y, sobre todo, 40 millones de españolitos cambiando a otra versión cuando a Microsoft le de la gana de cambiar el formato de sus archivos.
Tal vez deberíamos castigar a nuestros políticos a que, por lo menos supieran que es OpenDocument (OASIS).
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