Pensaréis que está en Roma, pero no, está en Yamoussoukro, Costa de Marfil. Se trata de la Basílica de Nuestra Señora de la Paz. Al parecer, un expresidente de este país se gastó una fortuna en construir esta basílica, una réplica de la de San Pedro en Roma, en mitad de la jungla y, posteriormente, donó el resto de su fortuna al Vaticano.
Sólo se concedió una cosa, en una de las cristaleros (8.000 metros cuadrados), justo en la que se representa la entrada de Cristo en Jerusalem, aparece él.
La fotos son impresionantes, podéis ver algunas más aquí.
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